Este edificio se construyó como Hospital de la Misericordia (más tarde Ermita de ese nombre) que los visitadores en 1494 refieren así: "Presentóse Catalina Sánchez, beata, (en la terminología de la época quiere decir mujer que hace vida religiosa, con votos privados, sin profesar en convento) vecina de Bienvenida, y dijo que por su voluntad era servir a Nuestro Señor en los pobres, hacía donación de dos partes de casas que tenía cerca de la plaza, para hacer de ellas y a su costa, hospital que se llamara de la Misericordia, con una dependencia para capilla, donde los pobres enfermos puedan oír cada día la Santa Misa". Los Visitadores estampan un auto aprobando la fundación. Cuatro años más tarde, por la Visitación de 1498,  vemos que el Hospital estaba ya ultimado; que tenía un ancho de zaguán, dos habitaciones con dos camas cada una, para enfermos, dos amplios corrales y una capilla, que luego en el siglo XVIII se edificó de nueva planta, dedicándola a Ntra,. Sra de la Misericordia. Todo desapareció en la primera mitad del pasado siglo por efecto del huracán de leyes desamortizadoras. Tierras y casas fueron vendidas en pública subasta, amañada casi siempre o retenidas sin título legítimo alguno y enajenadas después. Del Hospital de la Misericordia quedó unicamente la Ermita.