La Iglesia Parroquial de notables proporciones y buena arquitectura, en la que se aprecian rasgos del estilo mudéjar en algunos de sus componentes.
El templo, como resulta dominante en el entorno, se halla bajo la advocación de Santa Marta. Constructivamente está ejecutado en mampostería de piedra y ladrillo sin encalar, erigiéndose exento sobre un podio aterrazado, dispuesto para salvar la acusada pendiente del terreno. Su planta es de una sola nave dividida en cuatro tramos, con cubierta de cañón, coro a los pies, y cabecera más angosta, de ábside poligonal, con bóvedas de, crucería.