En el margen occidental de la localidad e integrándose en ella, emplazada sobre una colina de la falda noroccidental de Sierra Morena y al este del Río Viar, se levanta el Castillo de Montemolín. Se trata de una fortaleza almohade que, junto con la de Alange, Hornachos y Reina, fueron puntos estratégicos e importantes en cuanto al control de la vía de comunicación entre Córdoba, Sevilla y Mérida.
Aunque no existe constancia, la obra puede ser del siglo XII, paralelamente a los restos de la mezquita que pudieron ser incorporados a la ermita de la Granada. Las primeras noticias de la fortaleza de las que se tiene constancia, se remontan al periodo en que era maestre de la Orden de Santiago, D. Pelay Pérez Correa (1242-1275).
Fortaleza de grandes dimensiones y solidez, en un recinto más o menos rectangular, con orientación este-oeste, cuyos frentes largos son el norte y el sur, de unos 130 metros por 50 metros de ancho.