La fuente de María Miguel se sitúa junto al puente de Jerez, en la salida norte de la población.
En torno a ella se ha elaborado una leyenda inmortalizada en uno de los cuadros del frexnense Eugenio Hermoso. El relato nos presenta a dos enamorados, María y Miguel, a cuya relación se oponen los padres de la joven. Los mismos mandan asesinar a Miguel mientras esperaba a María y al llegar ella y encontrar a su amado muerto no soporta tanto dolor y fallece poco después.
Sus padres, arrepentidos, acuerdan enterrarlos juntos en las cercanías de la fuente y de sus tumbas nació un almendro, que aún hoy da sombra a los que se acercan a él.