La mansión se levanta en dos plantas, con vanos rectangulares, según el prototipo de construcciones tradicionales tan extendido por la ciudad. El solar perteneció a diversos linajes jerezanos siendo la mayoría de sus propietarios caballeros de la Orden de Santiago, así como regidores perpetuos de Jerez. Hemos de destacar sobre todo a uno de sus más famosos propietarios, D. Pedro de Quevedo y Quintano que ocupó la silla episcopal de Orense, donde murió en 1818. Se hizo célebre porque durante la Guerra de la Independencia formó parte del Consejo de Regencia, del que fue nombrado su presidente, y consejero de Fernando VII.